Por: Mons Hugo Alberto Torres Marín
El santo padre Francisco invita a la Iglesia Católica Universal a dedicar el año 2024 a la ORACIÓN como preparación del jubileo del año 2025 cuyo lema es “Peregrinos de la Esperanza”.
Una de las motivaciones o razones para reforzar la oración este año lo constituyen los interrogantes que va suscitando el panorama global de un mundo que vive una situación de pesadumbre por su olvido de Dios. Esta pesadumbre se nota en la crisis ecológica, económico-social, las guerras, la cultura del descarte y de la indiferencia.
La Arquidiócesis de Santa Fe en consecuencia con su Proceso Evangelizador que tiene como gran meta para el 2028 “crecer en la conciencia de ser comunidad misionera al servicio del Reino de Dios mediante el encuentro con Cristo”, invita a todos los creyentes cristianos, católicos, alejados, a los no creyentes, a hacer que este tiempo de cuaresma, Semana Santa y la Pascua 2024 una oportunidad para encontrar al Señor, permanecer en él, conocerle a través la escucha de la Palabra de Dios, la oración y la transformación de las realidades sociales.
La Semana Santa de la Ciudad Madre de Santa Fe y las de todas las parroquias de la Arquidiócesis, lo mismo que la Pascua es “un tiempo para redescubrir, tanto personalmente como en comunidad, la alegría de la oración en su variedad de formas y expresiones”. Que todos los momentos del final del tiempo de cuaresma, la celebración del Triduo Pascual, la octava de pascua, con sus acciones litúrgicas especialmente la eucaristía, las devociones populares como las procesiones, el viacrucis, los arreglos de los pasos, etc., sean como una escuela de oración en la que el Espíritu Santo como Maestro interior, muestre el camino para el encuentro con Cristo en su Pasión, Muerte y Resurrección.
Dice el Papa Francisco” Que la oración personal y comunitaria sea incesante, sin interrupciones, según la voluntad del Señor Jesús (Lc18,1), para que el Reino de Dios se extienda y el Evangelio llegue a todo aquel que esté buscando amor y perdón”.