#EvangelioDelDomingo | Jesús nos invita a reflexionar sobre las prioridades de nuestra vida. Un hombre rico, lleno de inquietudes espirituales, busca la vida eterna, pero su apego a las riquezas materiales le impide seguir el camino de la perfección. Jesús nos enseña que la verdadera riqueza está en el desprendimiento y la generosidad, en acumular tesoros en el cielo y no en la tierra.
El desafío que plantea este evangelio es claro: lo que poseemos puede volverse un obstáculo si no sabemos ponerlo al servicio de Dios y de los demás. El Reino de Dios está abierto para quienes saben dar sin medida y confían en la providencia divina, porque solo el amor de Dios puede llenar el corazón de quien se vacía de lo material para seguir a Cristo.